El flujo disminuido de sangre hacia el corazón daña directamente el músculo cardíaco, que se endurece y no puede llenar de manera apropiada las cámaras con sangre o que se vuelve débil y debe esforzarse más para bombear sangre a todo el cuerpo. Un corazón sometido a largos períodos de estrés se descompensa y cambia su forma y su funcionalidad de manera permanente.
El flujo disminuido de sangre hacia el corazón daña directamente el músculo cardíaco, que se endurece y no puede llenar de manera apropiada las cámaras con sangre o que se vuelve débil y debe esforzarse más para bombear sangre a todo el cuerpo. Un corazón sometido a largos períodos de estrés se descompensa y cambia su forma y su funcionalidad de manera permanente.
✔ Este daño local genera disfunción regional, que altera directamente la forma del corazón y su funcionalidad de varias maneras: a). El corazón se relaja de manera inapropiada y se contrae de manera averiada como resultado de la muerte permanente del músculo. b). La parte afectada se contrae sin sincronía con el resto del corazón, impidiendo que el bombeo sea efectivo.
✔ También puede alterar la funcionalidad y la forma del corazón indirectamente porque el corazón remodela sus otras partes para compensar las insuficiencias funcionales de la región lesionada.2
Según el registro nacional de insuficiencia cardíaca en los hospitales chilenos las principales causas de insuficiencia cardíaca de pacientes hospitalizados en el año 2004 fueron la hipertensión y la isquemia cardíaca.4
Los riesgos de la coexistencia de la aterosclerosis con tu insuficiencia cardíaca:
✔ Empeora el pronóstico: los pacientes con ambas enfermedades tienen riesgo de mortalidad aumentado en hasta un 250% según algunos reportes.
✔ La aterosclerosis puede empeorar tu insuficiencia cardíaca, pues puede alterar la forma y la funcionalidad del corazón de varias maneras, acelerando el progreso de la condición existente.2
✔ La aterosclerosis puede provocar nuevas complicaciones en cualquier parte del cuerpo.1,2